La Audiencia Provincial de Palencia ha impuesto penas que suman más de treinta años de prisión a dos hermanos por agredir sexualmente, retener y robar a una mujer a la que habían conocido a través de redes sociales y a la que mantuvieron contra su voluntad en una vivienda de Autilla del Pino en marzo de 2024.

El tribunal considera probado que la víctima permaneció retenida desde la tarde del 9 de marzo hasta la mañana siguiente, cuando logró escapar y pidió ayuda desesperadamente en una residencia de mayores de la localidad.

Según la sentencia, la mujer viajó a Autilla del Pino para acudir a una cita con uno de los acusados. En la vivienda donde se encontraban, el tribunal concluye que este hombre la agredió sexualmente en repetidas ocasiones, pese a la negativa expresa de la víctima a mantener relaciones sin protección.

A la mañana siguiente, volvió a someterla a nuevas agresiones sexuales. Durante ese periodo, la víctima permaneció en un estado de temor continuo que le impidió abandonar el domicilio.

Posteriormente, el acusado contactó con su hermano, que se unió a los actos de violencia y humillación. Ambos obligaron a la mujer a desnudarse parcialmente, a adoptar poses de carácter sexual y a permanecer sometida a golpes y amenazas.

También la forzaron a realizar varias transferencias bancarias que agotaron su saldo y, finalmente, la trasladaron atada y amordazada a un gallinero anexo a la vivienda, donde emplearon una motosierra para realizar cortes junto a su cuerpo con el objetivo de intimidarla. La sentencia destaca que en el lugar se hallaron cuerdas, cortes en mobiliario y otros elementos coherentes con el relato de la víctima.

La mujer consiguió liberarse horas después y pidió auxilio en un centro de mayores, donde relató lo ocurrido. Ese mismo día, los dos condenados acudieron a varios locales de alterne, robaron un vehículo y sufrieron un accidente en Villamuriel de Cerrato. Al intentar sustraer otro coche, fueron sorprendidos por la Guardia Civil y, tras amenazar a los agentes con un arma simulada, fueron reducidos y detenidos.

El hermano que cometió las agresiones sexuales más graves ha sido condenado a 22 años y 6 meses de prisión por delitos de agresión sexual con acceso carnal, detención ilegal, robo con violencia, un delito contra la integridad moral y negativa a someterse a la prueba de alcoholemia, además de varias multas por estafa leve y robo de uso de vehículo.

El segundo hermano ha sido condenado a 14 años de prisión por agresión sexual en contexto vejatorio, detención ilegal y robo con violencia, a lo que se suman multas por estafa leve y robo de uso de vehículo. Ambos han sido absueltos del delito de atentado a la autoridad por no quedar acreditado suficientemente durante el juicio.

La Audiencia sustenta su resolución en la declaración inicial de la víctima ante la Guardia Civil —corroborada por informes médicos, análisis de telefonía y los hallazgos en la inspección ocular— y explica que, aunque durante la vista oral la mujer mostró lagunas de memoria, su declaración en instrucción y las pruebas objetivas resultan suficientes para superar el estándar exigido por el principio de presunción de inocencia. La sentencia no es firme y puede ser recurrida ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León.