El Kirolbet Baskonia dijo adiós este jueves a sus aspiraciones de estar en la 'Final Four' de Belgrado tras caer ante el vigente campeón Fenerbahce (83-92) en el cuarto envite de la eliminatoria de los cuartos de final, un recital de Marko Guduric (22 puntos) que, apoyado en Nicolo Melli (21), fue una auténtica pesadilla para los locales en el Buesa Arena.

Los baskonistas no lograron la machada pero no se puede decir que no lo pelease. Un equipo hundido al inicio de la temporada supo rearmarse con la llegada de Pedro Martínez para plantarse en cuartos. En el primer partido perdió, en el segundo aprendió la lección y plantó cara y en el tercero ganó. En el cuarto no pudo ser. El escolta serbio (22 puntos) se bastó para acabar con las esperanzas vitorianas, que encontraron en Poirier a su mejor hombre.

El pívot francés (14 puntos) frenó el 'efecto Vesely' y puso a los suyos a la altura del rey de Europa. Pero la experiencia y el saber hacer de los turcos acabó imponiéndose en el último parcial, cuando se le acabó la gasolina a los de casa y Kalinic acabó certificando el triunfo y el pase a su cuarta 'Final Four' seguida.

La dirección de juego de Marcelinho hizo mella en los turcos y los vitorianos lo aprovecharon para marcar el ritmo y llevar la iniciativa en el marcador. Pero poco les duró la alegría. Sloukas tomó el mando de los de Obradovic que se apoyaron en el tiro exterior, por medio de Melli y Guduric, para castigar (32-48, al descanso) a los locales, más imprecisos en ataque y blandos en defensa.

En la reanudación, los de Estambul mantuvieron su dura defensa para frenar a Beaubois, que por momentos recordó al del tercer partido, y alcanzar los +20 desde la línea de personal por las constantes faltas locales, empujados por la olla a presión del Buesa Arena que arengó a los suyos y clamó contra los árbitros.

Cuando parecía fuera del partido, Baskonia tiró de casta y carácter para firmar sus tres mejores minutos de la eliminatoria, con un parcial de 10-0 para reducir la ventaja (62-69, minuto 29) y meter miedo al Fenerbahce.

En los últimos minutos, Kalinic y Guduric, un castigo en todo momento, sacaron los galones y aprovecharon que los baskonistas bajaron el ritmo para certificar el triunfo, que permite a los de Obradovic acceder a la 'Final Four'. Su rival será el Zalgiris Kaunas, que echó al Olympiacos y con Saras Jasikevicius al mando prometen batalla.