El desarrollo de la línea de alta velocidad entre Palencia y Cantabria da un nuevo paso con la ejecución de obras en el subtramo Palencia Norte-Amusco, que provocarán afecciones al tráfico en la autovía A-65 a partir de este miércoles, según ha informado el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible.

Los trabajos, enmarcados en la construcción de la plataforma de la nueva línea de alta velocidad entre Palencia y Aguilar de Campoo, forman parte del proyecto que cuenta con una inversión global de 1.700 millones de euros y que permitirá acortar los tiempos de viaje entre Santander y el resto del país.

La intervención forma parte de la construcción de los cinco primeros subtramos de esta línea de alta velocidad, con un total de 78,4 kilómetros hasta Alar del Rey.

Para garantizar la seguridad de los operarios y de los usuarios de la vía, las obras se desarrollarán en dos fases. La primera, del 16 al 24 de julio, implicará el corte de la calzada de la A-65 en sentido Benavente entre los kilómetros 4,800 y 9, cuyo tráfico se desviará por un solo carril en la calzada contraria mediante pasos de mediana, así como el cierre de los ramales de enlace.

La segunda fase, del 5 al 14 de agosto, afectará a la calzada en sentido Valladolid en el mismo tramo, repitiéndose el desvío por la calzada opuesta y el corte de los accesos de enlace.

En ambos casos, se mantendrá abierta la autovía en ambas direcciones durante la operación especial de tráfico del 1 de agosto.

Adif también trabaja en la redacción del tramo Alar del Rey-Reinosa, que completará la conexión con Cantabria, y en la denominada ‘conexión Nogales’, un enlace de 3,2 kilómetros que permitirá la puesta en servicio parcial del trazado.

Mientras se completa la infraestructura de alta velocidad, el Ministerio impulsa también mejoras en la línea ferroviaria convencional entre Reinosa y Santander para garantizar la continuidad del servicio.