El nuevo líder del PSOE de Castilla y León y alcalde de Soria, Carlos Martínez, ha instado a los miembros de la nueva Comisión Ejecutiva Autonómica a dejar de lado las diferencias provinciales y enfocarse en la construcción de un proyecto común y "creíble" para la Comunidad. En su intervención durante el 15 Congreso Autonómico del partido, donde se ha oficializado su liderazgo, ha subrayado la importancia de ofrecer una "voz autónoma" que responda a las necesidades de Castilla y León en su conjunto, alejándose de la división que, según él, beneficia al PP.

"Os lo pido y os lo ruego porque va a ser una máxima que tengamos que intentar cambiar si nosotros queremos cambiar", ha expresado Martínez, apuntando a la "falta de proyecto de Comunidad" que atribuye al Partido Popular. A su juicio, el PSOE-CyL debe convertirse en ejemplo de cohesión territorial y demostrar que tiene un plan "autonómico sólido, creíble y sustentado en los territorios, pero con una voz autónoma". Para ello, ha señalado la importancia de generar empatía y evitar enfrentamientos internos.

Sobre las identidades dentro de Castilla y León, Martínez ha abogado por el respeto a la diversidad, al tiempo que ha pedido que el partido se enfoque en una visión global para "trabajar en equipo y conformar una melé que, hombro con hombro, sea capaz de derrocar la barrera de la división en la que tan cómodo se encuentra el Partido Popular durante los últimos 40 años".

Asimismo, ha animado a sus compañeros a olvidar disputas internas y centrarse en articular un proyecto común con la fortaleza necesaria para afrontar la campaña electoral: "Configuremos un proyecto autonómico, generemos un equipo para pegar con fortaleza cada uno de los días que tenemos por delante".

Martínez ha valorado la unidad demostrada en el Congreso, aunque ha advertido que solo tendrá sentido si logran llevar ese mensaje conjunto a todas las provincias. Consciente de los desafíos hasta las elecciones, ha destacado que la mejor respuesta ante la "desesperación, la resignación y el pesimismo" que atribuye a la derecha es ofrecer "esperanza" con un "equipo sólido".

En su discurso, ha insistido en que el liderazgo debe ser compartido y basado en el municipalismo, rechazando la idea de un único líder que pueda llevar el proyecto adelante sin un esfuerzo colectivo. "Quien considere que los liderazgos horizontales, transversales, son liderazgos débiles, será el mejor enemigo que podamos tener delante", ha advertido.