Marta García es auténtica hasta para celebrar sus éxitos. No se le ocurrió otra cosa, minutos después de ser bronce europeo que felicitar a su madre. "Enhorabuena... por haberme parido", le espetó por teléfono.

Cierto es que la brillante ocurrencia de la atleta palentina llegó tras conseguir calmar su preocupación. "No os he visto y me he preocupado", le decía a su madre la corredora, a la que probablemente le hubiera gustado celebrarlo con sus progenitores en la propia pista del estadio de Roma. "Os he buscado por todos lados", le insistía.

Sin embargo, la ausencia de sus padres en el primer momento de la celebración no era obstáculo para compartir la alegría tras el éxito logrado. "Tengo antidoping, esperadme si no estáis muy cansados", pedía encarecidamente Marta.

Tras la llamada, reconocía a los servicios de la Federación Española, que han hecho público el vídeo en las redes sociales, que temía principalmente por su padre. "Le ha dado un ataque al corazón o se ha caído por las escaleras", expresaba la atleta palentina, consciente de la relevancia que un logro internacional como el que acababa de conseguir podía tener para su entorno más cercano.