Desde hace más de diez años, Aquona, empresa que gestiona el suministro y la depuración de aguas en Palencia, y la Asociación de Naturalistas Palentinos colaboran con el objetivo de que el ciclo integral del agua esté plenamente incorporado en la naturaleza.

Fruto de esa colaboración nació algunos años el proyecto de cambiar el concepto de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Palencia y convertirla en un lugar en el que, además del proceso de depuración de las aguas, pueda existir "un ecosistema adecuado" para la vida de animales y plantas.

Así lo expone Fernando Jubete, coordinador de proyectos de la Asociación de Naturalistas Palentinos, que no duda en afirmar que la colaboración entre ambas entidades ha generado "una sinergia y una simbiosis" que ha favorecido la biodiversidad del espacio.

Para ello, se ha eliminado el uso de productos fitosanitarios, se ha controlado la presencia de especies invasoras y se ha "naturalizado" el entorno, explica Laura de Vega, directora de Desarrollo Sostenible y Transformación de Aquona.

El resultado ha sido una integración de la depuradora en el espacio natural que ocupa, lo que posibilita además que se una "una planta muy atractiva para muchas especies de aves".

De ello han sido testigos esta semana alumnos del colegio Divino Maestro de Palencia, que han visitado la ecofactoría con motivo de la celebración del Día Mundial de la Biodiversidad. Además de visitar la planta depuradora, han podido ayudar al anillamiento de algunos ejemplares de aves y, de esta forma, conocer la diversidad ornitológica el entorno.

Fernando Jubete les ha explicado que "no se trata de capturar aves por placer, por tenerlas en la mano, sino que se pretende obtener importante información" como la tendencia de las poblaciones o su éxito reproductor.