La heredera apeló a "volver", a "los básicos" que sostienen cualquier sociedad democrática: el respeto, la educación y la empatía hacia los más vulnerables
Los Reyes presiden el tercer homenaje a las víctimas de la pandemia en el Palacio Real
Se han entregado 37 condecoraciones a sanitarios que fallecieron contagiados cuando trabajaban contrarreloj, luchando contra la pandemia
Tras la pandemia originada por la Covid-19, Don Felipe VI y Doña Letizia han presidido por tercer año consecutivo el homenaje de Estado a las víctimas del Coronavirus. Un acto en el que se recuerda a las personas fallecidas por la pandemia de la Covid, a sus familiares, allegados y a los servicios sociales y sanitarios.
El evento ha tenido lugar a primera hora de la mañana en la Plaza de la Armería del Palacio Real, en Madrid, donde hemos podido ver a los monarcas acudir bajo el lema de 'Un aplauso para el recuerdo'.
Hoy es el primer día que vemos a la Reina Letizia sin mascarilla FFP2, después de haberla lucido toda la semana tras haber dado positivo en Covid el pasado 5 de julio.
En dicho acto se han entregado 37 condecoraciones a sanitarios que fallecieron contagiados cuando trabajaban contrarreloj, luchando contra la pandemia que se apoderaba de nuestras vidas. Más tarde, se ha llevado a cabo una ofrenda floral y un minuto de silencio. 'Un aplauso para el recuerdo' terminará con el discurso del Rey Felipe.
Los Reyes no han estado solos, se han reencontrado con los representantes de altas instituciones; el jefe de la oposición; el presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias; delegados del Gobierno; y el alcalde de Madrid, además de representantes parlamentarios y una amplia representación de las familias de las víctimas, de los sectores sanitario y científico, y de la sociedad civil.
Alice Wonder, cantante madrileña, interpretará con piano y voz la canción 'Lucha de gigantes', de Antonio Vega, mientras que se proyecta el vídeo 'Un aplauso para el recuerdo' y más tarde las condecoraciones continuarán dentro del Palacio Real.
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Una ciudad flotante que no duerme, o duerme por turnos, y en la que conviven los más variados perfiles y oficios








